Soñé que conocía a David Bowie en un bar en el centro de São Paulo. Teníamos un romance y bailábamos “Lady grinning soul” con mucha levedad, casi volando como parecen volar los patinadores sobre hielo. Él vestía de dorado y su cabello era rojo. La pista de baile también era dorada.
Jenny Fonseca Tovar
São Paulo
Brasil