Un niño aparece de entre una montaña de ropa de mi habitación. Sale corriendo hacia la calle con mi sudadera atigrada. Lo sigo por calles abarrotadas de gente hasta una fuente donde un chico con rastas y una camiseta de ganesha medita. El niño se detiene delante del chico, se quita la sudadera y todo su cuerpo es rociado con agua que viene de arriba, tras eso se transforma en un chico albino.